Enfermedad: Cuidando a la pareja

Esperamos que tú y tu esposo siempre gocen de buena salud a lo largo de su matrimonio.

Pero si tu esposo está enfermo o discapacitado, y no hay nadie más disponible para ayudar, debes hacer lo necesario para cuidarlo aún si estás nidá. Sin embargo, debes evitar tocarlo o bañarlo, o hacer su cama en su presencia, a menos que sea absolutamente necesario.

Las reglas son más estrictas si tú eres quien está enferma o inhabilitada, porque es más fácil para un esposo sano iniciar intimidad con una esposa enferma que viceversa. En este tipo de situación, él debe ser particularmente cuidadoso de no tocarte, o tocarte sólo a través de ropa o mientras usa guantes.

En cualquiera de los casos, un/a esposo/a que está enfermo/a y que necesita ayuda no debe sufrir innecesariamente. Y en el caso de una enfermedad peligrosa, jas veshalom, pikuaj nefesh (salvar una vida) toma precedencia sobre toda consideración halájica.

Las halajot en esta área son complejas y dependen de situaciones precisas y de la naturaleza y severidad de la enfermedad. Por lo tanto, es importante, hacer una pregunta halájica específica sobre cómo conducirse, cada vez que sea posible.

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